A los 70 años, María Sorté, la icónica reina de la televisión mexicana, ha decidido abrir su corazón y revelar los amores de su vida, dejando claro que su historia no es la típica. La reconocida actriz ha mencionado que no tiene uno, sino tres hombres extraordinarios que han influido en su camino: su hijo Omar García Harfuch, su difunto esposo Javier García Paniagua y uno de sus colegas más entrañables.

María describe a Omar, exsecretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, como su mayor fuente de orgullo. Su reciente anuncio de postularse para la jefatura de gobierno de la Ciudad de México en las elecciones de 2024 ha captado la atención nacional, y su madre no ha dejado de apoyarlo en cada paso. Sin embargo, su relación va más allá del vínculo madre-hijo; también se refleja en el apodo humorístico de “la suegra de México”, que destaca la admiración hacia Omar, a menudo descrito como físicamente atractivo.

A lo largo de su carrera, María ha enfrentado desafíos personales, incluido el dolor de perder a su esposo Javier cuando Omar solo tenía 16 años. A pesar de la tristeza, ha logrado inculcar en sus hijos los valores que él representaba, y su dedicación como madre ha sido fundamental en la vida de Omar.

En una reciente entrevista, María compartió su deseo de que su hijo sea reconocido no solo por su apariencia, sino por su carácter y compromiso con el servicio público. Ella enfatiza que, a pesar de sus preocupaciones como madre, está orgullosa del hombre en que se ha convertido.

La trayectoria de María Sorté en el mundo del entretenimiento es notable. Desde su debut en los años 70 hasta su regreso en la telenovela “Diseñando tu amor”, ha dejado una huella imborrable en la televisión mexicana. Su historia, marcada por resiliencia y amor, no solo refleja su carrera, sino también el profundo vínculo que tiene con su familia. Al compartir su vida, María Sorté invita a sus seguidores a conocer la mujer detrás del ícono, revelando la fortaleza y el amor que han guiado su camino.