A sus 32 años, Frida Sofía, modelo y empresaria mexicana, ha decidido romper su silencio tras años de controversias familiares que han sacudido a su vida y carrera. Su relación con su madre, Alejandra Guzmán, y su abuelo, Enrique Guzmán, ha estado marcada por un distanciamiento doloroso, especialmente después de que Frida interpusiera una denuncia penal contra su abuelo, acusándolo de abuso.
En una serie de revelaciones impactantes, Frida ha compartido su proceso de sanación, describiendo un “renacer” emocional que le ha permitido reflexionar sobre su pasado traumático. A lo largo de este tiempo, ha buscado liberarse de las expectativas impuestas por su familia, reconociendo que su camino hacia la sanación incluye tanto la terapia como la búsqueda de su propia voz en el mundo del entretenimiento. Aunque su relación con Alejandra ha sido compleja, Frida ha expresado su deseo de sanar y encontrar un sentido de paz, mientras que su historia continúa captando la atención del público, que sigue expectante ante los próximos pasos de esta joven valiente en su lucha por la verdad y la justicia.