Hollywood enfrenta críticas por la percepción de que las celebridades influyen en las elecciones, especialmente en la derrota de Kamala Harris ante Trump.
Expertos sugieren que el apoyo de figuras públicas no tuvo un impacto significativo en los resultados electorales, a pesar de la inversión de 1000 millones de dólares en la campaña de Harris.
La campaña de Kamala Harris terminó con deudas de aproximadamente 20 millones de dólares, a pesar de los esfuerzos por atraer a celebridades para eventos y conciertos.
Críticas hacia la concept de que las celebridades pueden cambiar la opinión pública, con algunos argumentando que su participación es irrelevante para la mayoría de los votantes.
Comentarios en redes sociales destacan el desinterés del público por las opiniones políticas de las celebridades, señalando que no comprenden las dificultades cotidianas de la población.
La percepción de que las celebridades están desconectadas de la realidad se ha intensificado, con muchos votantes expresando que sus opiniones políticas son irrelevantes.
La influencia de Hollywood en la política parece estar en declive, con un creciente escepticismo sobre el papel de las celebridades en las campañas electorales.
