La Triste Historia de Choche de Bronco | Por Esta Razón Murió
La música regional mexicana ha perdido a una de sus figuras más queridas, José Luis Villarreal, conocido como Choche de Bronco. Su trágica muerte, ocurrida el 30 de septiembre de 2012, dejó una huella imborrable en el corazón de sus compañeros de banda y de millones de fanáticos que lo consideraban un hermano. Choche, cuyo talento y carisma fueron fundamentales para el sonido característico de Bronco, luchó en privado contra la cirrosis hepática, una batalla que comenzó años antes y que mantuvo alejado del escenario durante su último año de vida.
La historia de Choche es una mezcla de pasión, sacrificio y un amor incondicional por la música. Desde que se unió a Bronco en 1979, contribuyó a forjar un sonido único que fusionaba diversos géneros, revolucionando la música chicana y conectando con audiencias de todas las edades. Su habilidad para tocar múltiples instrumentos y su carisma en el escenario lo convirtieron en el corazón de la banda.
La tragedia golpeó a Bronco en 2012, cuando durante una gira en Chicago, el grupo recibió la devastadora noticia de su fallecimiento. Lupe Esparza, líder de la banda, recordó cómo el dolor compartido con el público se convirtió en un tributo a Choche, quien siempre fue considerado más que un compañero de trabajo; era un amigo y un pilar emocional.
A pesar de los años de éxito y de la fama alcanzada en los años 80 y 90, la lucha de Choche con su salud pasó desapercibida para muchos. Durante su vida, mantuvo una conexión especial con los más jóvenes, incluso creando un programa de televisión infantil que resonó en muchas familias. Su legado perdura no solo a través de la música de Bronco, sino también en los recuerdos que dejó en quienes tuvieron la fortuna de conocerlo.
Hoy, Bronco sigue en el escenario, honrando la memoria de Choche a través de sus canciones. Su espíritu, lleno de alegría y humanidad, continúa vivo en cada interpretación, recordándonos que detrás de cada éxito hay historias de lucha y amor que nunca deben ser olvidadas.
