Morgan Freeman ha roto su silencio sobre la muerte de Gene Hackman en un emotivo homenaje durante la ceremonia de los Premios Óscar. A los 87 años, Freeman compartió su profunda amistad con Hackman, quien falleció recientemente. En su discurso, Freeman no solo celebró la carrera de Hackman, sino que también reveló detalles íntimos sobre sus últimos días y su lucha contra el Alzheimer.
El veterano actor recordó cómo Hackman, incluso en sus momentos más difíciles, se preocupaba por los demás, destacando su dedicación al arte y su influencia en el cine. “Hollywood perdió a un gigante, y yo perdí a un hermano”, afirmó Freeman, mientras compartía la promesa que le hizo a Hackman de contar su historia.
Freeman rememoró su primera colaboración en “Los Imperdonables”, donde Hackman transformó cada escena en una lección de actuación. Además, Freeman reveló cómo Hackman lo ayudó en sus momentos de duda, instándolo a no rendirse ante los rechazos en su carrera. El homenaje también abordó la profunda conexión que surgió entre ambos desde sus días en Broadway en los años 60.
Sin embargo, el discurso de Freeman no se limitó a los logros profesionales de Hackman; también tocó aspectos personales, como su relación con su esposa Betsy, quien fue su principal cuidadora durante su enfermedad. La revelación de que Hackman padecía Alzheimer avanzado añadió una capa de tristeza al homenaje, lo que provocó una respuesta emocional en el público presente.
Freeman concluyó con una poderosa reflexión sobre el legado de Hackman, afirmando que su impacto en la actuación va más allá de premios y reconocimientos. “Gene no fue solo un gran actor; fue un revolucionario silencioso que cambió la forma en que entendemos la complejidad humana en la pantalla”, declaró Freeman, cerrando con una ovación de pie que resonó en el Dolby Theatre.
Esta emotiva ceremonia no solo recordó a Hackman como actor, sino también como un ser humano que dejó una huella imborrable en la industria del cine y en la vida de quienes lo conocieron.