Hugh Jackman ha causado revuelo en Hollywood al revelar que Blake Lively podría ser la mente maestra detrás del proyecto de la película “Deadpool” y “Wolverine”. La influencia de Lively en la industria del cine está siendo objeto de un intenso escrutinio, especialmente tras informes que sugieren que tuvo un papel crucial en la producción de la película protagonizada por su esposo, Ryan Reynolds.

Todo comenzó con una simple fotografía de Blake en el set con el emblemático traje rojo de Deadpool, que rápidamente se convirtió en el centro de una controversia. Los rumores indican que su participación no se limitó a un cameo, ya que supuestamente tomó decisiones creativas significativas, incluso influyendo en el desenlace del filme.

No es la primera vez que Lively enfrenta acusaciones de manipulación en proyectos cinematográficos. Fuentes cercanas revelan que en “It Ends With Us”, Blake habría desplazado al director Justin Baldoni, asumiendo un control mayor sobre el montaje final que él mismo. Esto ha generado una percepción de que la actriz ha intentado adueñarse de la narrativa de las producciones en las que participa.

La controversia se intensificó cuando salió a la luz que Lively había envenenado a sus compañeros de trabajo en “Gossip Girl”, afectando su relación con su ex coprotagonista Penn Badgley. A pesar de los problemas en el set, Badgley y Baldoni han forjado una amistad sólida, lo que contrasta con los rumores que rodean a Lively.

Además, se han filtrado mensajes donde Lively se refiere a Ryan Reynolds y a Taylor Swift como sus “dragones” en una lucha por el poder en Hollywood. Sin embargo, se dice que Taylor está comenzando a distanciarse del escándalo. En medio de este torbellino, Baldoni ha decidido demandar a Lively por 400 millones de dólares, alegando difamación, extorsión civil e incumplimiento de contrato.

La situación ha llevado a que importantes estudios y marcas reconsideren su relación con Blake Lively, en un entorno donde la lucha de poder en Hollywood se vuelve cada vez más evidente. Este dramático giro en la dinámica de la industria del entretenimiento ha dejado a muchos expectantes, y los comentarios del público no se han hecho esperar.