La hija de Paquita La del Barrio ha decidido romper el silencio tras la muerte de la icónica cantante, revelando tensiones familiares que han salido a la luz. Desde el fallecimiento de Paquita, lo que se esperaba fuera un momento de duelo se ha transformado en un campo de batalla por la herencia. El distanciamiento entre los hijos biológicos y su hija adoptiva, Marta Elena, se hizo evidente durante el velorio, lo que sugiere que las rencillas ya existían antes de la partida de la artista.

La situación se complica aún más porque Marta Elena ha sido la responsable de manejar las finanzas de Paquita en sus últimos años, lo que podría generar recelos entre sus hermanos. A pesar de que en 2023, Paquita había afirmado no tener intenciones de dejar herencia y que su fortuna era escasa, datos de Celebrity Network contradicen esta afirmación, estimando su patrimonio en alrededor de 10 millones de dólares. Esto plantea la pregunta: ¿dónde está ese dinero?

La muerte de Paquita ha expuesto las heridas abiertas en su familia, donde el dinero y la herencia han empezado a dividirlas. La falta de un testamento claro podría prolongar esta disputa familiar por años, ya que los procesos de sucesión intestada en México son complicados y sin un documento legal que defina la distribución de bienes, el conflicto podría intensificarse.

Más allá del drama familiar, la imagen pública de Paquita podría verse afectada. Su legado, construido durante décadas como una voz de empoderamiento femenino, podría verse empañado por la batalla legal entre sus hijos. Mientras tanto, el futuro de su música y su impacto cultural dependen de cómo se maneje su herencia. La historia de Paquita La del Barrio no solo es la de una artista, sino la de un símbolo que transformó el panorama musical y social de México. La pregunta ahora es si sus hijos podrán honrar su legado y mantener viva su memoria sin caer en la explotación comercial.