Angela Aguilar expresa su profundo amor por México, destacando la conexión cultural y acquainted que siente con el país.
La artista menciona que cada día aprende más sobre la cultura mexicana, incluyendo la comida y los trajes típicos.
Aguilar comparte su nostalgia por Guadalajara, recordando momentos como disfrutar de tacos y tortas ahogadas.
La cantante aborda el impacto de las críticas en redes sociales, enfatizando la importancia de enfocarse en la música y el crecimiento artístico.
Pepe Aguilar, padre de Angela, reflexiona sobre la percepción pública y la importancia de mantenerse fiel a uno mismo a pesar de las opiniones ajenas.
Se discute la necesidad de aprender a lidiar con el “hate” en redes sociales, sugiriendo que la música debe ser la prioridad.
