Camila Sodi firma la voluntad anticipada de su madre, Ernestina Sodi, quien se encuentra hospitalizada tras sufrir dos infartos, generando controversia sobre la decisión.
La situación familiar se complica con el silencio de las hermanas de Ernestina, Thalía y Laura Zapata, lo que ha suscitado especulaciones sobre su relación y apoyo en este momento crítico.
Laura Zapata exige justicia y cadena perpetua para Thalía, acusándola de complicidad en fiestas depravadas, mientras la salud de Ernestina sigue en estado crítico y la presión mediática aumenta.